Normativa acústica y insonorización
¿Quieres crear un entorno de trabajo donde tus empleados puedan concentrarse completamente en sus tareas sin ser molestados por el ruido ambiente? La insonorización de tus espacios de trabajo es un paso esencial para lograr este objetivo.
Entender la norma ISO 23351-1.
Normalización de la evaluación del mobiliario y conjunto de altavoces. La norma ISO 23351-1 para simplificar.
El objetivo de esta norma es establecer un test que pueda aplicarse a todos los productos del mercado del aislamiento acústico. Este mercado es muy amplio y tiene varias particularidades.
Por lo tanto, era necesario someter a todos estos productos a un mismo protocolo de prueba, con el fin de ofrecer una comparación efectiva de las diferentes soluciones que responden al mismo objetivo: reducir el ruido en una cabina acústica.
La norma ISO 23351-1 es la referencia desde 2020, y ha reemplazado a las normas anteriormente utilizadas, como la ISO 10140-2, la ISO 16283-1, la ISO 10052, la ISO 11546-1 y la ISO 11957.
La norma ISO 23351-1 es un documento técnico que establece los criterios para evaluar la eficacia de las cabinas acústicas en términos de insonorización.
Tiene en cuenta varios factores para garantizar un rendimiento óptimo de las cabinas en términos de reducción del ruido. Entre estos criterios, se incluye principalmente el nivel de presión acústica, que mide la cantidad de ruido dentro y fuera de la cabina, así como el índice de atenuación acústica, que evalúa la capacidad de la cabina para disminuir el ruido exterior.
Lo ideal para una cabina acústica es cumplir con la clase A o B de la normativa.
La norma ISO 23351-1 clasifica las cabinas acústicas en diferentes categorías según su rendimiento acústico, que van desde la letra A+ hasta la E. Esta clasificación permite a los usuarios elegir la cabina más adecuada para sus necesidades de insonorización, según el entorno de trabajo y el nivel de ruido ambiente.
Tras nuestros estudios y pruebas, hemos decidido clasificar nuestras cabinas en la categoría B. Esta clasificación ofrece el equilibrio perfecto entre una acústica óptima que se adapta a tu uso, un espacio interior cómodo y una ventilación eficaz. Las cabinas de clase A, aunque tienen una calidad acústica superior, son menos móviles debido a su mayor tamaño y suelen ser mucho más caras.
Nuestras cabinas te permiten pasar de una sala ruidosa a una oficina tranquila
Primero, es importante entender que la escala de decibelios es logarítmica y no lineal. Por ejemplo, un aumento de 3 decibelios conlleva duplicar la intensidad del sonido.
Nuestras cabinas, teniendo una reducción de 28 dB, te permiten pasar de un entorno ruidoso de alrededor de 70 dB (una sala o un espacio abierto con ruidos) a un espacio tranquilo de 40 dB (una oficina tranquila, una biblioteca silenciosa).
Ventajas de la insonorización con cabinas acústicas.
Mejora de la concentración y la productividad.
Las cabinas acústicas son la solución ideal para que las empresas reduzcan el ruido de manera eficaz en espacios abiertos, creando así un entorno de trabajo tranquilo y propicio para la concentración. Esta atmósfera favorece una mayor productividad de los empleados, quienes pueden dedicarse por completo a sus tareas en un ambiente sereno y sin distracciones.
Bienestar y satisfacción en el trabajo.
Crear un entorno de trabajo tranquilo que reduce el estrés de los empleados fomenta la calidad de trabajo y mejora el rendimiento.
Adaptabilidad a diferentes entornos y necesidades variadas.
Las cabinas acústicas se adaptan a una variedad de entornos profesionales, desde empresas modernas hasta industrias tradicionales. Su versatilidad satisface las necesidades específicas de cada sector, mejorando considerablemente las condiciones de trabajo.
Mayor confidencialidad.
Las cabinas acústicas ofrecen un espacio privado donde los empleados pueden tener conversaciones confidenciales o hacer videollamadas sin temor a que otros compañeros los escuchen.
El aislamiento acústico.
Propagación del sonido y materiales.
La acústica se basa en principios sencillos: el sonido se propaga mediante vibraciones a través del aire y los materiales. En un espacio abierto, donde muchos empleados trabajan juntos, estas vibraciones pueden reflejarse y propagarse, creando un entorno ruidoso y molesto.
Hay varios factores que pueden influir en la propagación del sonido en un espacio de trabajo, como la disposición del mobiliario, la superficie de los materiales e incluso la presencia de personas. Por ejemplo, las superficies duras como el hormigón o el cristal, tienden a reflejar el sonido, mientras que los materiales absorbentes como la lana de roca o el tejido pueden atenuarlo.
Presión y atenuación acústica
Nuestras cabinas acústicas desempeñan un papel esencial en la reducción del ruido gracias a su cuidado diseño.
La norma establece criterios para evaluar la eficacia de los cerramientos acústicos en términos de insonorización. Para juzgar la calidad de una cabina acústica, se tienen en cuenta una serie de características específicas, como los coeficientes de presión sonora y de reducción del sonido.
El coeficiente de presión sonora mide la cantidad de ruido dentro y fuera de la cabina, lo que ayuda a determinar la eficacia del aislamiento acústico. Cuanto menor sea el coeficiente, mejor será el aislamiento acústico de la cabina.
Del mismo modo, el índice de reducción del sonido evalúa la capacidad de la cabina para atenuar el ruido exterior, proporcionando un interior más silencioso. Estos criterios son esenciales para garantizar un aislamiento acústico óptimo y una reducción significativa del ruido en el espacio de trabajo.
Work With Island,
Fabricante de oasis de calma para espacios compartidos
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